domingo, 17 de diciembre de 2017

VIETNAM

Comunicado del Comité Ejecutivo
 del Consejo Mundial por la Paz *


Hanoi, noviembre 23-25, 2017

La reunión del Comité Ejecutivo (CE) del Consejo Mundial por la Paz (CMP) tuvo lugar exitosamente en la capital de la República Socialista de Vietnam, Hanoi, los días 23 al 25 de noviembre, teniendo como anfitrión al Comité por la Paz de Vietnam. A la primera reunión del CE después de la Asamblea Mundial del CMP de 2016 en Sao Luis, Brasil asistieron 44 delegados en representación de 26 organizaciones de igual número de países.

El CE dedicó una sesión especial al Centenario de la Gran Revolución Socialista de Octubre y su servicio a la lucha por la paz, como fuera acordado por la más reciente asamblea del CMP. La conclusión abrumadora de la reunión fue que este evento extraordinario y altamente significativo del siglo XX cambió el curso de la humanidad y abrió el camino para otras transformaciones y revoluciones sociales, económicas y políticas, demostrando que la lucha de los pueblos puede vencer y crear nuevas sociedades libres de dominación y explotación imperialistas. Por lo tanto, la Revolución de Octubre continúa siendo una fuente de inspiración para los pueblos.

Al celebrar nuestro CE en la capital de Vietnam, Hanoi, expresamos nuestro profundo respeto y aprecio por el pueblo vietnamita, que peleó victoriosamente contra los fascistas japoneses y los colonialistas franceses, así como contra los imperialistas estadounidenses en sus guerras en Vietnam, y que ha tenido logros notables en la construcción del socialismo y el desarrollo nacional a pesar de las consecuencias de la guerra que aún subsisten, incluyendo millones de víctimas del tóxico “Agente Naranja” utilizado en aquel tiempo por el ejército de los EE.UU. El CMP expresa su solidaridad incondicional con el pueblo vietnamita por todo lo anterior.

La reunión del CE del CMP analizó la situación mundial relativa a las amenazas a la paz y la estabilidad, la creciente agresión imperialista y las guerras en varias partes del mundo, así como la respuesta de los pueblos y movimientos por la paz; y expresó su mayor preocupación por los crecientes peligros de un conflicto catastrófico de dimensión mundial, incluyendo el uso de armas nucleares.

En un contexto de prolongada crisis económica del sistema, de graves amenazas de guerra, de la continuación de largas y catastróficas guerras imperialistas, agresiones, maniobras desestabilizadoras y de la acelerada militarización del planeta, al tiempo que fuerzas fascistas y reaccionarias emergen en diversos países, el CMP analizó y fijó metas y campañas que puedan apelar a la percepción de los pueblos y aumentar su concientización. 

El escenario internacional continúa siendo inestable, lleno de tensiones y amenazas, que se tornan más peligrosas a medida que la crisis se profundiza como consecuencia de las contradicciones de un sistema político, económico y social desigual. Dos tendencias opuestas caracterizan la situación internacional. De una parte, enfrentamos la ofensiva y competencia de las fuerzas imperialistas y hegemónicas para dominar el mundo y apoderarse de los recursos de los pueblos y las naciones. En esta ofensiva los imperialistas y sus aliados dispuestos actúan con furia. De otra parte, existen muchas indicaciones del potencial de la lucha de los pueblos y la resistencia de organizaciones y movimientos y las fuerzas de la paz y el progreso social. El CMP se esforzará por lograr la alianza más amplia posible y acciones conjuntas que puedan abrazar todas estas luchas por objetivos comunes. Al propio tiempo, deben hacerse esfuerzos específicos para dejar al descubierto las causas que originan las guerras, la miseria y la desigualdad, promoviendo y fortaleciendo las fuerzas progresistas y antiimperialistas y sus acciones.

La política de “giro hacia el Asia” de los EE.UU., de enviar el 60% de su poderío militar a la región, continúa siendo implementada por el nuevo presidente de los EE.UU. conjuntamente con la poderosa Séptima Flota de la Marina de los EE.UU., las más de 200 bases militares de los EE.UU. en la región, incluyendo al Japón y a Corea del Sur, y los acuerdos militares bilaterales de los EE.UU., cuya reforma incluirá incluso el envío de tropas a diversos países, como ya es el caso con decenas de miles de tropas estadounidenses en la región.

El interés particular de los EE.UU. y sus aliados en el área se basa en el control geo-estratégico de toda el área, sus rutas marítimas y recursos naturales, evitando conflictos fatales. Pero también tiene por objetivo contener a la emergente República Popular China.

El CMP apoya todas las luchas contra la presencia militar y las maniobras de los EE.UU. en la región. En Okinawa continúa creciendo una lucha que involucra a amplios sectores de la sociedad contra la construcción de una nueva base de la Marina de los EE.UU. en Henoko/Nago City. El CMP expresa su solidaridad con estos movimientos en Okinawa y en la tierra firme de Japón.

Nepal ha continuado moviéndose hacia la estabilidad política con las elecciones del gobierno local y las venideras elecciones parlamentarias federales y provinciales. A pesar de la interferencia extranjera para impedir la promulgación de una nueva constitución, y los intentos de provocar conflictos entre las diversas castas y comunidades en el seno de la nación y provocación de estados federales formados por etnias, la constitución está siendo implementada. Al enfocarse hacia las elecciones parlamentarias existe una perspectiva de tener un nuevo gobierno progresista con el amplio apoyo del pueblo nepalí. El CMP respeta este deseo del pueblo nepalí y quisiera expresar sus buenos deseos de éxito.

El CMP sigue con preocupación el desarrollo al sur del Mar de China, particularmente las disputas territoriales entre varios países vecinos. Apoyamos la solución pacífica bilateral y multilateral de las diferencias entre todas las partes involucradas. Llamamos a todas las partes a abstenerse de cualesquiera acciones unilaterales que puedan complicar más la situación; confirmamos nuestra posición de principios a favor del respeto y la implementación de la ley internacional, incluyendo la Convención de las Naciones Unidas sobre la Ley del Mar de 1982 (UNCLOS, por sus siglas en inglés), que garantiza los derechos soberanos de todos los países. Nos oponemos fuertemente a la militarización del área, así como a la presencia militar y acciones de potencias no regionales, especialmente los EE.UU., que claramente tiene sus propios motivos e intereses. Exigimos su retirada de la región y llamamos a todas las partes a una desescalada militar de la situación.

El Consejo Mundial por la Paz expresa solidaridad y apoyo al pueblo de Laos en sus esfuerzos por librarse de las consecuencias de décadas de guerra, especialmente de los pertrechos de guerra sin explotar de finales de la década de 1960 e inicio de la década de 1970, cuando tres millones de toneladas de bombas fueron lanzados sobre Laos. El treinta por ciento de las bombas de racimo no explotaron; en la actualidad algunos campesinos mientras trabajan en el campo o niños que juegan con las bombas del tamaño de una pelota de tenis son mutilados o muertos por esas “bombitas”. Además, la presencia de esos pertrechos de guerra sin explotar en casi todas las provincias entorpece el desarrollo del país.

Expresamos nuestra simpatía por el pueblo Rohingya de Myanmar, que enfrenta la inmensa crisis humanitaria causada por el gobierno del país, y que está siendo perseguido y huye para salvar la vida, con serias quejas de las políticas de limpieza étnica. Exigimos al gobierno garantizar la seguridad de los civiles y dar pasos inmediatos para poner fin a la violencia a fin de restituir las condiciones socio-económicas normales, incluyendo el regreso de los refugiados a sus hogares.

El CE del CMP expresa su seria preocupación por el creciente esfuerzo religioso y fundamentalismo en el sur de Asia, que son utilizados para dividir las luchas de los pueblos. Llamamos a las organizaciones sociales a estar alertas acerca de esta explosiva situación y a movilizarse contra ese intento divisorio.

El CMP reitera su exigencia de la retirada de los EE.UU. y la OTAN de Afganistán como condición para permitirle a la gente decidir libremente y sin interferencia acerca de sus asuntos internos.

La situación en y alrededor de la península coreana se está tornando “explosiva”. Todas las amenazas y provocaciones militares deben cesar inmediatamente. Todas las partes involucradas deben dar pasos para una solución diplomática y pacífica sin demora. Denunciamos la presencia de 28 000 tropas de EE.UU. al sur de la península con toda suerte de armas altamente sofisticadas, incluyendo armamento nuclear, así como el establecimiento de una nueva base de EE.UU.en la isla Jeju. El despliegue de la cortina de fuego antiaéreo THAAD por los EE.UU. en Corea del Sur llama abiertamente a una primera opción de ataque sin la posibilidad de desquite. También presenta amenazas a la R.P. China y a la Federación de Rusia. El CMP se encuentra firme en su solidaridad con el pueblo coreano, por su deseo de la reunificación nacional pacífica y por el derecho de la República Democrática de Corea de defender su soberanía e integridad territorial, conjuntamente con sus recursos naturales.

El CMP reafirma su posición de principios sobre la abolición de todas las armas nucleares y su oposición al ensayo de ningún armamento nuclear. El Llamado de Estocolmo, una iniciativa histórica principal del CMP, firmado por cientos de millones de personas preocupadas por la amenaza del uso de estos arsenales, continúa estando vigente y sigue siendo una guía para nuestra acción. El Tratado sobre la Prohibición de Armas Nucleares (aprobado el 7 de julio de 2017) es un hito en el camino hacia su total eliminación, la aspiración largamente anhelada por los Hibakushas y los pueblos del mundo. El tratado reconoce que las armas nucleares son inhumanas con consecuencias catastróficas si son usadas nuevamente, y se oponen a la carta de las Naciones Unidas y a la ley Internacional. Todos los estados deben firmar sin demora el tratado sobre la prohibición de las armas nucleares.

Los estados con armas nucleares y sus aliados no firmaron el Tratado. Tenemos que continuar desarrollando opinión pública que pueda ejercer presión sobre ellos para que abandonen la política de “disuasión nuclear”.

Al propio tiempo subrayamos el hecho de que los EE.UU. es el único país que ha utilizado tales armas a lo largo de la historia. Además, los EE.UU. no se abstienen de una primera opción de ataque nuclear; por el contrario, la han presentado también a la OTAN, que la ha adoptado. Apoyamos la proposición de mutua suspensión de los ejercicios militares alrededor de la península por parte de los EE.UU., Japón y Corea del Sur, con la eliminación de THAAD y la suspensión del programa nuclear por la R.P.D. de Corea. El CMP declara una vez más su claro desacuerdo con cualquier sanción impuesta a la R.P.D. de Corea, ya que ello constituye un esfuerzo por estrangular al pueblo.

El caso de Ucrania es el episodio contemporáneo más relevante en el continente europeo que muestra tendencias fascistas, así como las acciones imperialistas de asedio y provocación y su intento de sitiar a Rusia. El régimen derechista en Kiev, apoyado por los EE.UU. y la UE, le hace el juego a la estrategia de fortalecer la presencia de los imperialistas en la Europa del este a fin de enfrentar a Rusia. El Consejo Mundial de la Paz apoya la lucha del pueblo ucraniano. Nos oponemos resueltamente al régimen fascista y expresamos solidaridad sin reservas con los comunistas ucranianos y otras fuerzas progresistas sometidas a odiosa persecución.

También seguimos con preocupación la persecución sufrida por las fuerzas antiimperialistas amantes de la paz en Turquía, y particularmente la Asociación por la Paz de Turquía, miembro del CMP, que fue prohibida por el gobierno en 2016 como secuela del intento de golpe. Exigimos su inmediata reincorporación. El gobierno de Turquía es aliado del imperialismo estadounidense y europeo en la región, y promueve una agenda reaccionaria, conservadora y agresiva contra su propio pueblo y vecinos. Como miembro histórico y estratégico de la OTAN, Turquía acoge cabezas nucleares de los EE.UU. y apoya directamente a las fuerzas extremistas y terroristas que están peleando en Siria.

Reafirmamos nuestra solidaridad con el pueblo de Chipre y con la posición del CMP adoptada en la más reciente asamblea por la reunificación de la isla y el fin de la ocupación turca, en una patria común para todos los chipriotas (chipriotas griegos y chipriotas turcos), sin tropas ni bases extranjeras, sin custodios ni guardianes, en un país reunificado, con una soberanía, una ciudadanía y una personalidad internacional, como se describe en las resoluciones correspondientes de las NN.UU. Además rechazamos y denunciamos los esfuerzos de colocar a Chipre directa o indirectamente bajo la OTAN, lo cual también formó parte de la invasión y ocupación parcial de la isla en 1974.

El CMP denuncia la presencia de la flota de la OTAN en el Mar Egeo con el pretexto de la ola de refugiados y emigrantes, y los planes de la OTAN en el área. Condenamos las acciones del gobierno griego que, al tiempo que renueva el acuerdo militar entre EE.UU. y Grecia en la base de Souda (Creta) está ofreciendo instalaciones para el despliegue de helicópteros militares de EE.UU. en suelo griego y la perspectiva de recibir drones en Creta.

Día a día el Mar Egeo se está convirtiendo en cementerio de cientos de familias que huyen de Siria, Irak y Afganistán destruidos por la guerra. Las islas griegas están siendo convertidas en campamentos de refugiados, sin recursos suficientes o adecuados para recibir y alojar a esta gente. Una cuestión clave en esta tragedia siguen siendo las regulaciones de la UE de los acuerdos Schengen y Dublín II, conjuntamente con el acuerdo entre la Unión Europea y Turquía. Denunciamos la hipocresía de la UE y de los gobiernos de muchos de los países a través de los cuales los refugiados están viajando, que son abiertamente hostiles a ellos.

El CMP reitera su firme posición contra la OTAN como instrumento de la dominación imperialista y brazo armado de los imperialistas de EE.UU. y la UE. La expansión de la OTAN hacia el este, su asedio de Rusia a lo largo de sus fronteras, con el desplazamiento de tropas desde el Mar Báltico a Bulgaria y la instalación del Escudo de Defensa contra Misiles en Polonia y Rumania están aumentando la tensión agresiva y deliberadamente. Esto va de la mano con las sanciones de los EE.UU. y la UE contra Rusia. La OTAN está desarrollando y aumentando su arsenal enfocado a la capacidad de dar el primer golpe nuclear contra sus oponentes. Ha decidido aumentar el presupuesto militar de todos los miembros al 2% del PIB anual de cada uno. Luchamos por y exigimos la disolución de la OTAN a nivel global, al tiempo que apoyamos la lucha de los pueblos en cada Estado miembro de retirarse de ella. La Unión Europea, por su cuenta y/o con la OTAN, está actuando contra sus pueblos. Su política de Seguridad y Defensa Común constituye una peligrosa herramienta para la intervención extranjera y la agresión imperialista en muchas partes del mundo.

El plan reaccionario e imperialista para el “nuevo Medio Oriente”, respaldado por los EE.UU., la OTAN y la UE con su intervención militar abierta y en cooperación con los regímenes reaccionarios de la región, ha añadido nuevos sufrimientos a millones de personas que huyeron para salvar sus vidas a todos los países vecinos. Su objetivo fue y es el control de los recursos energéticos y las líneas de suministro y control geo-estratégico del área con nuevas fronteras y nuevos regímenes sumisos.

Expresamos nuestras condolencias a las familias de las víctimas del reciente ataque terrorista en Egipto, donde cientos de civiles perdieron sus vidas, y condenamos este acto cobarde e inhumano.

La política guerrerista e intervencionista de las grandes potencias, aliadas con fuerzas locales reaccionarias, es cada vez más intensa en todo el Medio Oriente. Siria, Afganistán, Irak, Libia, Líbano y Yemen son objetivos para la agresión imperialista y las intervenciones desestabilizadoras. Tomamos nota positivamente de los éxitos significativos del pueblo sirio en su lucha contra el terrorismo y la intervención extranjera. Declaramos nuestra solidaridad con el pueblo progresista y amante de la paz y sus organizaciones en Siria, y reafirmamos su inalienable derecho a construir por ellos mismos un país laico, soberano y democrástico en el cual la gente con diferentes credos puedan vivir juntos, con un gobierno legítimo y con integridad territorial. El CMP reitera su condena a los EE.UU. y sus aliados europeos, Turquía, Israel y las despóticas monarquías del Golfo, que han apoyado directa o indirectamente, financiado y entrenado mercenarios y grupos religiosos extremistas para atacar a Siria al costo de millones de vidas.

Expresamos nuestra seria preocupación por las nuevas amenazas del gobierno de los EE.UU. e Israel contra Irán, a la luz del posible retiro de los EE.UU. del acuerdo internacional sobre actividad nuclear firmado por el anterior gobierno de los EE.UU. y los otros miembros permanentes del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. Los peligros de una escalada del conflicto se refieren también a las relaciones en deterioro entre Irán y Arabia Saudita. Por la parte del CMP confirmamos nuestra solidaridad con el pueblo de Irán y sus fuerzas amantes de la paz contra cualquier interferencia extranjera en sus asuntos y en apoyo a su lucha por los derechos del pueblo en los aspectos sociales, políticos y en todas las esferas.

El CMP está seriamente preocupado por las declaraciones provocadoras y las amenazas proferidas por el imperialismo de los EE.UU. contra Irán, que han adquirido una dimensión muy peligrosa desde que Donald Trump visitara a Arabia Saudita – donde cerró una operación masiva de venta de armas por $300 miles de millones – y luego a Israel en mayo de 2017. Por estos días otro crimen de guerra está siendo cometido con la mayor corriente humanitaria, según las NN.UU., en Yemen. Un país que se encuentra bajo fuertes ataques y agresiones por parte de una “coalición” liderada por los sauditas, que hoy en día está resultando en cientos de miles de casos de hambre y desnutrición, y una pandemia de cólera en 2017, sin contar los miles de civiles que han sido asesinados por los bombardeos. El CMP denuncia la agresión contra el pueblo yemenita, que está siendo apoyada totalmente por los EE.UU., y exige el fin del cerco y el derecho del pueblo yemenita a decidir solos y libremente sus asuntos.

Denunciamos al régimen de Israel por su continua ocupación en aumento de las tierras palestinas con el apoyo del imperialismo, a fin de controlar toda la región. Esto continúa siendo un elemento clave en la estrategia de dominación y de impedir la paz en el Medio Oriente. El CMP reitera su solidaridad con la heroica lucha del pueblo palestino contra la política genocida y opresiva del estado de Israel, que somete al pueblo a una cruel opresión. Defendemos el derecho inalienable del pueblo palestino al establecimiento de su Estado independiente y soberano con las fronteras anteriores al 4 de junio de1967 y con Jerusalén oriental como su capital, de acuerdo con las resoluciones de NN.UU. Exigimos el desmantelamiento de los asentamientos israelíes en la Franja de Gaza y la eliminación del muro de separación, así como la libertad de siete mil prisioneros políticos palestinos que se encuentran en prisiones israelíes, y el cumplimiento del derecho de los refugiados a regresar, de acuerdo con la Resolución 194 de NN.UU. Hacemos un llamado al reconocimiento del Estado de Palestina como miembro pleno de las NN.UU., por parte de los estados miembros de las NN.UU. El CMP analizará y lanzará una campaña bajo el lema: ¡FIN A LA OCUPACIÓN AHORA!

El CMP expresa su solidaridad con las fuerzas amantes de la paz en Israel, que enfrentan al régimen autoritario del país al tiempo que luchan hombro con hombro con el pueblo palestino por la causa común.

El CE del CMP expresa su solidaridad con el pueblo libanés por la defensa de la integridad y estabilidad del país, y denuncia los planes de convertirlo en un escenario para los programas de las fuerzas extranjeras. Exigimos la retirada de las fuerzas israelíes de las fincas Shebaa libanesas.


Expresamos nuestra seria preocupación por la turbulencia en la República Bolivariana de Venezuela, provocada por la guerra económica de la oligarquía local en conformidad con la posición agresiva del nuevo gobierno de los EE.UU., que continúa la política inaceptable y peligrosa de la Orden Ejecutiva de Obama que llama a Venezuela una “amenaza a la política exterior de los EE.UU. y a su seguridad”. Denunciamos la abierta intervención en los asuntos internos del país y la amenaza de una intervención militar de los EE.UU. en Venezuela, especialmente después de la elección de la Asamblea Nacional Constituyente. Esperamos que la Asamblea ayude a abrir caminos para resolver los problemas de forma pacífica y democrática, y al mismo tiempo para la profundización de las transformaciones en pro de los intereses de la inmensa mayoría del pueblo venezolano. Condenamos la reciente decisión de los ministros de Relaciones Exteriores de la UE, que impusieron sanciones a Venezuela, lo que constituye un acto de escalada de la interferencia de los EE.UU. en el país.

Reiteramos nuestra solidaridad con el pueblo de Puerto Rico, la colonia de EE.UU. en el Caribe, en su lucha por el derecho a la autodeterminación y contra la opresión multifacético a sus ciudadanos.

Estamos siguiendo con preocupación los eventos en Brasil, donde tras el golpe parlamentario en 2016 contra la presidenta electa, un gobierno anti-popular tomó el poder con el propósito claro y abierto de servir al capital local e internacional y con un programa reaccionario.

El CMP expresa su solidaridad con el pueblo de Argentina en el ejercicio de sus derechos soberanos sobre las Islas Malvinas, y condena la burda violación por parte de los antiguos amos coloniales.

A un año del deceso del líder histórico y Comandante en Jefe de la Revolución Cubana Fidel Castro, rendimos tributo y homenaje al líder que no solo cambió con su decisiva contribución la vida del pueblo cubano, sino que con su modestia y sabiduría fue un líder revolucionario de dimensión mundial y una de las pocas personalidades de ese nivel en el siglo XX. El CMP reafirma su demanda incondicional del cierre inmediato y permanente de la Base Naval de EE.UU. en Guantánamo, territorio ocupado contra la voluntad del pueblo cubano, y por la devolución de dicho territorio a Cuba. Declaramos nuestra sincera e inquebrantable solidaridad con el pueblo cubano y su revolución, en la defensa de sus logros y el fin del criminal bloqueo de los EE.UU. y todos los demás intentos de interferencia desestabilizadora.

El CMP saluda a los pueblos de América Latina y el Caribe, y expresa su solidaridad con la lucha por el derecho soberano a decidir ellos mismos su propio futuro y su camino de desarrollo, libres de maquinaciones extranjeras y subversión. Subrayamos la importante decisión de la CELAC que declaró a la región “Zona de Paz”, reflejando los genuinos sentimientos y aspiraciones de la inmensa mayoría de la población del hemisferio occidental.

Expresamos nuestra solidaridad con el pueblo de Colombia en su deseo por lograr una paz justa y vivir con dignidad después de la firma de los Acuerdos de Paz entre el gobierno colombiano y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia – Ejército del Pueblo (FARC-EP). Al propio tiempo, denunciamos absolutamente el cobarde asesinato de campesinos, miembros de las FARC y líderes del movimiento social colombiano que están teniendo lugar en violación de los acuerdos.

El continente africano continúa experimentando diversos grados de inestabilidad como resultado directo de la intervención imperialista en busca de un programa para explotar sus recursos. El continente continúa estando caracterizado por problemas internos y externos como resultado de las maquinaciones locales y multinacionales del gran capital, que lo han arrastrado a guerras y creado inestabilidad política, y por las amenazas abiertas del imperialismo. El Comando de EE.UU. para África (Africom) continúa arrastrando a partes del continente al conflicto, y sus políticas expansionistas han resultado en una ampliación de la pisada del militarismo. Muchos gobiernos han sido arrastrados a juegos geopolíticos de posicionamiento entre los imperialistas, y el imperialismo busca conquistar más recursos y mercados para sus corporaciones multinacionales.

En el África Occidental, Francia continúa sojuzgándola y tiene una estrategia de dominación debido a las relaciones coloniales históricas, el idioma y otros factores que han existido durante muchos años. Turquía también se ha fijado el objetivo de involucrar al continente a fin de presentarse como un amigo genuino “sin intenciones ni historia de colonialismo y dominación”. Erdogán, entre otros, ha convocado a una cumbre Turquía-África para movilizar apoyo para sus objetivos y mercados para la burguesía turca. La UE se ha trazado un programa de la llamada promoción de la democracia y ha financiado procesos para la promoción de elecciones democráticas en muchos países africanos. China ha sido vista por muchos africanos como una amenaza debido a las relaciones históricas del imperialismo y su propaganda en el continente.

El CMP reafirma su solidaridad con el pueblo del Sahara Occidental. Condenamos la ocupación marroquí del Sahara Occidental y subrayamos nuestra solidaridad con la justa lucha del pueblo saharahui, por su derecho inalienable a la autodeterminación bajo un referéndum libre y democrático.

Es con estas convicciones que el Comité Ejecutivo del CMP está decidido a formular resoluciones y mociones que promuevan la amplia unidad en acciones por la paz, la democracia, la justicia social y la solidaridad entre los pueblos. ¡De esta forma fortaleceremos la solidaridad de los pueblos en la lucha por la paz, contra el imperialismo!

El CMP está enviando un mensaje a los pueblos del mundo, a la gente amante de la paz en todos los países, desde Hanoi, capital del heroico Vietnam, cuyo pueblo, bajo la sabia guía de Ho Chi Minh luchó heroicamente, cara a cara victoriosamente con el imperialismo estadounidense liberando y unificando el país. No importa cuán fuerte el enemigo pueda parecer o ser, los pueblos tienen el poder de resistir y de vencer, ya que constituyen la única “superpotencia”.


Hanoi, 25 de noviembre de 2017

*El Movimiento Mexicano por la Paz y el Desarrollo, 
estuvo presente con dos delegados, en esta importante reunión del Consejo Mundial por la Paz

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